Por Liliana Fernández Los estado-nación se formaron con un discurso ideológico liberal que inducía a sus ciudadanos a percibirse como miembros de una misma etnia, una misma nación. En ese sentido, la escuela como institución del Estado asumió la función de garantizar la unidad lingüística, por ejemplo, y sostener la construcción de una ciudadanía nacional basada en una herencia cultural compartida, en la cual se niega la historia de otras potenciales naciones consideradas menos civilizadas, más tradicionales como la de los ashéninkas pajonalinos. No existe una política educativa específica y localizada para los pueblos amazónicos que les permita construir su propia historia y reconocerse como integrantes de una nación multicultural y plurilingüe como es el Perú. Así se explica el hecho de que la Amazonía haya sido visto o aún sea visto por los gobiernos como un inmenso espacio vacío que necesita ser ocupado. Por este tipo de pensamiento, la educación secundaria en el Gran Pajo...